El tiempo termina por elevar casi todas las fotografías,
aun las más torpes, al nivel del arte
SUSAN SONTAG
Para recomponer visualmente la vida íntima y pública…
hay que recurrir a estos fotógrafos (aficionados)
PUBLIO LÓPEZ MONDÉJAR
Como dice el poeta y buen amigo de Cristóbal, José Luis Puerto, en su libro Memoria Visual de La Alberca, «la fotografía es, junto con el cine, la más significativa contribución contemporánea al ámbito de las bella artes, cuyo campo se ensancha y enriquece de modo muy significativo con tales aportaciones. Al tiempo, la fotografía se ha manifestado como una herramienta muy poderosa para documentar el mundo y al ser humano.
Como indica con lucidez Octavio Paz: «La fotografía redime», esto es, salva del olvido e incorpora a nuestro territorio de la memoria todo aquello que vivimos y que percibimos de nosotros mismos, de nuestra tarea y del planeta en que habitamos…
…Porque la fotografía surge de una alianza entre la mirada y la técnica. No hay fotografía posible sin una mirada atenta.»
A continuación se muestran algunas fotografías de Cristóbal a lo largo de su vida, de niño, con su familia, amigos, en reuniones diversas, trabajando… De muchas de ellas desconocemos su autor, pero son documentos gráficos curiosos e interesantes que nos acercan a su figura humana.