El pasado jueves 18 de mayo de este 2023 tuvo lugar la presentación de un hermoso libro sobre el poeta de La Alberca, José Luis Puerto. El acto tuvo lugar en la Facultad de Bellas Artes y estuvieron presentes, además de la autora, María Alcalá, el propio poeta homenajeado, María Padilla, como editora de esta publicación y el profesor de la Universidad de Sevilla y poeta, Antonio Molina Flores.
La presentación de este libro fue realizada por el profesor de Estética de la Univerdsidad de Sevilla Antonio Molina Flores, quien señaló entre otras cuestiones, lo emblemático del lugar donde se encontraban, justamente arriba de la cripta en donde se encuentra la sepultura del poeta Gustavo Adolfo Bécquer.
Antonio Molina destacó del libro lo primoroso del trabajo, por la extensión de la obra, y el amor por la poesía y figura del poeta, y compañero, que se desprendía en todo momento.
Muchos de los asistente a este acto fueron compañeros y alumnos, tanto del poeta como de María Alcalá, precisamente en el Instituto de Bachillerato Gustavo Adolfo Bécquer, en Triana, donde además coincidieron, a final de los años 70 y principios de los 80 con Cristóbal Aguilar y el pianista José Romero.
Antonio Molina fue junto a Cristóbal y algunas otras personas como Rafael Becerra, Francisco Núñez Rodán, Aurelio Alvea, Pepe Gil, Juan Ortiz, Rafael Arjona, o Juan Gallego, fundador de Cuadernos de Roldán, allá por los finales de los 80, y en la que participó asiduamente José Luis Puerto.
El enfoque de este libro es particular, no es un estudio y crítica literaria al uso sobre la obra de José Luis Puerto. En palabras de la autora «El componente biográfico tiene en la obra de este un enorme peso, tan grande como lo tiene la poesía en su vida. No estamos ante un hombre que se dedica, entre otras cosas, a escribir poesía, sino ante un poeta que, por serlo, vive como tal, de una manera particular, pues la poesía no es para él un aditamento, sino algo esencial, una forma de vida».
Otra de las particularidades de esta obra es el haber recogido la opinión sobre el poeta de distintas personas muy allegadas a él, en diferentes épocas de su vida, entre las que se encuentran la madre del poeta, Dolores Hernández, «un ser admirable, lleno de vida y de luz» y Cristóbal, compañero en aquellos años sevillanos del Instituto G.A. Bécquer y gran amigo a lo largo de todo el resto de su vida. No en vano, Cristóbal colaboró con el poeta en múltiples publicaciones de este, realizando bellísimas ilustraciones para algunos de sus libros.
Las otras personas entrevistadas por María Alcalá para escribir este libro fueron Jesús Manuel Bermejo, compañero del poeta en el internado de Linares de Riofrío, y luego en sus años universitarios de Salamanca; Esperanza Ruiz Arias, Luis Miguel Godoy y Pedro Fortet, de su etapa sevillana; y de sus últimas décadas, en Castilla y León, Asunción Escribano y María Jesús Fernández Cordero.
El resultado de esta obra, en palabras de la propia autora es «un trabajo personal hecho con una buena dosis de afecto, sin pretensiones, pero que contiene información y materiales que pudieran ser de utilidad para quien desee acometer un estudio de otro tipo sobre José Luis Puerto y su obra».
En el acto de presentación de este libro intervino también, además de la autora, el poeta y el citado profesor de la Universidad de Sevilla, María Padilla, como representante de la Editorial Padilla Libros Editores y Libreros. María Padilla quiso dejar muestra de lo gratificante que había sido trabajar con ella y lo respetuosa que la autora fue en todo momento con el trabajo de edición y maquetación. No fue la primera vez, ya que hace unos años ya trabajó con ella en Llamen a Alejandra y Pasos de Tango. La seguridad, firmeza y convicción de la autora fue, según María Padilla, una de las cuestiones a destacar y que sirvió para llevar a buen puerto este magnífico trabajo. Al hilo de esta intervención, José Luis Puerto recordó como en aquellos años de vivencia en Sevilla, eran habituales sus visitas a la librería y sus charlas con los fundadores de la editorial Padilla, los padres de María Padilla.
María Alcalá tenía claro para este libro que quería hacer y que no. No quería hacer un trabajo académico ni erudito, ni de crítica literaria. Según ella misma comenta en esta obra, «quería que fuera la tarea de una lectora -una lectora algo particular, por mi relación personal con el poeta y por mi profesión- dirigida a otros lectores, lo cual no me exime, claro, de ser rigurosa a la hora de refrendar con los textos mi personal lectura de su obra. También tenía la intención de dar a conocer a José Luis Puerto como figura humana, pues el tipo de persona que es, ya por si mismo, dice, al igual que su obra, algo que creo que en estos tiempos conviene escuchar».
Según la autora, una frase del poeta le dio la clave: «La obra de creación es inseparable de su creador».
María Alcalá renuncia en esta publicación a la antología como en un apartado en si mismo y decide ir incorporando los textos al hilo del trabajo central. En la parte dedicada a Vida, pensamiento y poesía, por su particularidad, nos encontramos varias series de poemas seguidos, precedidos de un texto de la autoras de cierta amplitud.
En esta presentación del libro sobre su figura y su obra, José Luis Puerto hizo un pequeño e inlvidable recorrido por su infancia, sus recuerdos de La Alberca, aquellos años de postguerra tan duros, de pobreza, trabajo en el campo, sus vivencias como monaguillo, recuerdos de la escuela, de sus personas más queridas y decisivas de aquellos difíciles años como el párroco de la iglesia, D. Saturnino Jiménez Hernández, y por supuesto, su madre. En el siguiente audio podemos disfrutar de un recuerdo de dicho momento:
En este acto de presentación en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, se recitaron algunos poemas de José Luis Puerto como broche de oro a este evento que resultó ser de lo más interesante y entrañable. José Luis Puerto recitó su bello poema Sostenerse, escrito durante aquellos días del confinamiento por la COVID-19. A continuación ofrecemos un audio del momento:
Como comentó María Alcalá a lo largo de su intervención en este acto de presentación del libro sobre el poeta salmantino, dicho acto era también un pequeño homenaje a dos de las personas que ya no están entre nosotros pero que han sido importantes en este libro. Una de ellas es Dolores, la madre de José Luis Puerto y la otra es Cristóbal Aguilar, Cristóbal, gran amigo del poeta, compañero también de la autora del libro y que ha dejado su sello en esta publicación, como persona entrevistada, así como con el retrato a lápiz que realizó del poeta y que queda impreso en la portada del libro.
José Luis Puerto ha dedicado a lo largo de su vida varios poemas a Cristóbal, uno de ellos es Ronda, que escribió en 1993 y que forma parte de Pasaje de Invierno.
Otro de los poemas dedicados a Cristóbal lo escribió a los pocos días de conocer su muerte, en mayo de 2019. Este poema fue recitado por María Alcalá como colofón al acto de presentación de su libro, y le acompañó a la guitarra Luis Aguilar, hijo de Cristóbal:
Agradecimientos: A Ángel Barroso por el reportaje fotográfico y a Fernando Sancho por los audios grabados en el acto.